Ha pasado más de una semana y Diego Sebastián Hurtado sigue grave, es el bebé de 11 meses casi un año, quien se debate entre la vida y la muerte, uno de los tres sobrevivientes del accidente que dejó como saldo nueve personas muertas en la autopista del Sol, en Guerrero.
Diego se mantiene grave en el Hospital del Niño en Toluca, pero la familia no tiene más recursos para solventar los gastos, todavía desconocen la cuenta a la que asciende la atención médica del bebé y no han logrado avanzar debido a la burocracia.
La familia García Paulino, con oficio de floristas, salió de vacaciones hacia Acapulco el 21 de mayo y de regreso hacia Toluca, el 24 de mayo, los impactó un tráiler que presuntamente perdió los frenos, a la altura del puente Solidaridad, en el tramo Chilpancingo-Paso Morelos de la autopista del Sol, llevándose la camioneta en la que viajaban al menos 13 personas, de los que murieron nueve, tres de ellos menores de edad, y sobrevivieron tres más, uno de ellos un bebé de 11 meses.
“Las autoridades hacen parecer que fue un accidente muy pequeño pero no fue así, en Guerrero nadie nos ha prestado ayuda e incluso el traslado del bebé de 11 meses que sobrevivió fue por nuestros propios medios, nadie nos brindó apoyo, ni Guerrero, ni el Estado de México nos ha respaldado. Dejaron libre al conductor del tráiler responsable del accidente y además la aseguradora de la compañía de esa unidad tampoco nos ha buscado. En la entidad solo una delegada de la colonia El Seminario nos ha brindado apoyo”, afirmó Nicolás García, sobreviviente del accidente carretero y tío del bebé.
Alegaron que pese a las denuncias, sus pertenencias y dinero se extraviaron, les quitaron todo el efectivo, tarjetas, celulares y maletas, no saben hacia dónde se llevaron la camioneta en la que viajaban, pues autoridades les dicen que está en un corralón, pero nadie tiene el dato concreto y mientras tanto, la cuenta para la atención del menor que se mantiene hospitalizado crece sustancialmente.
Agregó que en estos días, el menor se agravó, el sábado, y para el domingo le daban pocas esperanzas de vida, situación que se mantiene hasta ayer. En junio, Diego Sebastián Hurtado cumplirá 12 meses, su mamá falleció en el accidente y pese al dolor por la pérdida de una gran parte de su familia, se han sostenido porque todavía falta definir cómo van a lograr sacar adelante al niño.
A los gastos hospitalarios, se suma que los otros dos sobrevivientes deben regresar a Chilpancingo a declarar, además, estas dos personas, tíos del menor, apenas serán atendidos médicamente gracias a la intervención de la Facultad de Derecho de la UAEMéx.
"En realidad estamos olvidados, lo más seguro es que para las autoridades estamos olvidados, nadie nos ha apoyado, salvo una delegada de la colonia aledaña a donde vivimos en Toluca, además del respaldo de amigos, vecinos, familiares y en Almoloya de Juárez la autoridad nos permitió enterrar a nuestros familiares fallecidos", comentó.
Destacó que desconocen la situación jurídica del operador del tráiler y la empresa propietaria de la camioneta turística que ellos rentaron, tampoco se ha hecho responsable el seguro que estaba incluído en su contratación.
Debido a que los gastos siguen creciendo, los familiares piden ayuda a la gente y a las autoridades, pues no saben cómo van a enfrentar esta cuenta, porque por el momento solo aspiran a la evolución del menor:
"Nosotros nos encontramos mal, pero hay que seguir de pie, aunque estemos tan tristes, porque tenemos que hacernos cargo y prácticamente estamos olvidados y creo que si la autoridad estatal nos ayuda, quizá se podría solucionar rapidísimo", lamentaron.